¡Por fin llegamos al último episodio de Mahou Shoujo Ore! En el episodio anterior, Manager-san —Yamo, se llama Yamo— desvela que todo fue un elaborado plan para hacer que las Macho Shoujo saltaran a la fama y hacer que las chicas mágicas en general se convirtieran en tendencia. ¿Todo para qué? Para tener a gente con la que fanboyear porque adora el concepto de chicas mágicas. Aunque, bueno, las Macho Shoujo no son ni chicas (en su forma digievolucionada) ni mágicas, pero eventualmente les cogió cariño y no había nada mejor en el planeta Tierra.
Mientras Sakigasuki lucha contra una gran manada de machos nya con su inacabable poder del amor y sus músculos de acero, Ore flipa. Flipa porque su manager, en quien confiaba, le dice que tiene que pelear contra él en una batalla épica. O no tanto. Yamo no tiene ni digievolución bara, ni forma alternativa terrorífica ni poderes especiales así chungos, así que la batalla no promete mucho. Pero, oye, si con ello Ore logra salvar el mundo, será un exitazo en audiencias.
¿Os habéis dado cuenta de que, perdiendo, Yamo va a ganar sí o sí? Con lo lerdito que parecía, se va a salir con la suya.