¡Analizando Final Fantasy VII Remake: Capítulo III se suma a la serie de artículos sobre Final Fantasy! Aquí podéis consultar el anterior y aquí el resto de análisis. ¡Recordad que hay spoilers!
El Séptimo Cielo
El tercer capítulo del Remake comienza con un tono mucho más esperanzador. Mucho más que el final del capítulo anterior, al menos. Una vez alejados de la omnipresente torre de Shinra y del caos de la explosión, Avalancha se permite un segundo de gloria. No, se permite felicidad por haber vuelto sin bajas, habiendo coronado su misión. Ríen, gritan, y luego bajan la voz como niños pequeños que no se pueden permitir ser pillados por sus padres.
Hora de volver al hogar.
Entonces Barret, que tendría todos los motivos para ser hostil con Cloud, dado lo poco receptivo que es este, se detiene a recordarle que vaya al Séptimo Cielo. No solo eso, sino que con un tono suave, le exige que no preocupe a Tifa:
—No la hagas esperar, que luego se preocupa.
Con gestos así, poniendo a Tifa como excusa, Barret puede permitirse demostrar que le importa la seguridad de Cloud.
