De un tiempo a esta parte se han popularizado en occidente los webtoon, pero en su país de origen, Corea del Sur, estos webcómics estructurados en vertical son tan populares como el manhwa tradicional. Muchos son adaptados a otros medios, ya sean doramas coreanos como el caso de Dr. Frost o a anime como Noblesse, que primero tuvo una OVA-precuela realizada por un estudio coreano, y luego una animación japonesa que adapta la primera temporada del webcómic.
No es el caso de I Don’t Want This Kind of Hero, webtoon del que hablaremos hoy.
Primera obra de samchon y serializada por Naver Webtoon, esta es una historia de superhéroes, como podemos ver por el título. Al igual que otras obras del género, el protagonista, Naga, tiene poderes con los que podría destruir el mundo si así lo quisiera, y el webcómic cuenta con gran número de capítulos (301 en total, de los que están traducidos al momento de escribir esta reseña 196). Así que, ¿qué nos encontramos al leer I Don’t Want This Kind of Hero y qué lo hace destacable?
El mundo en el que se ubica la historia es uno donde las criaturas místicas, animales y personas que tienen habilidades sobrenaturales, existen. Se han relacionado con los humanos durante años, hasta el punto en que gran parte de la población es mixta (“mixed blood” en la traducción oficial). También hay psíquicos, como Naga, y brujas, como Hyena, además de otras personas con distintas habilidades. SPOON, una organización de héroes, intenta reclutar a Naga para que luche contra los villanos, ya que no hay persona más fuerte en el mundo. Por supuesto, los villanos contra los que luchan, KNIFE, también quieren tener a nuestro protagonista de su lado.
Si bien esa es la premisa, la historia está muy bien pensada. Dejando de lado la trama de momento, el mundo en el que se ubica queda muy bien presentado, no sólo por cómo lo tratan los personajes, sino por los hechos que se dan. Al parecerse hasta cierto punto al nuestro, no se da la necesidad de aclarar demasiadas cosas, pero sí se deja en claro cómo viven las criaturas místicas y los mixtos, y cómo se ubican en la sociedad. La discriminación, desde el ambiente laboral a cosas más extremas, como trata por el hecho de ser exóticos o simplemente distintos, está integrada con la trama de forma que el lector no sólo lo ve, sino que forma parte de la historia.
El apartado artístico causa impresión, ya que el dibujo plano y el uso de colores muy vivos, incluso en las onomatopeyas, hace parecer que sea una historia infantil. El estilo de dibujo también influye, con personajes que parecen ser jóvenes; también aquellos que no deben serlo. Y la narrativa se aprovecha de esa impresión, porque logra engañar al lector en los primeros capítulos, que son comedia, crítica y ligereza. Sin embargo, la trama se vuelve cada vez más oscura sin dejar de lado el humor, y los colores acompañan el tono de la obra en todo momento. Destaca especialmente su buen empleo cuando llega la hora del drama.
Los personajes tienen diseños únicos que impiden confundirlos, algo muy necesario teniendo en cuenta la cantidad que hay. Todos tienen personalidades muy marcadas, así como ambiciones y motivaciones personales, lo que se agradece. No se intenta desarrollar a todos los personajes por igual y la narrativa se centra en un grupo concreto; quienes mueven la trama. Con esto me refiero a que es muy común que se creen arcos para desarrollar a un personaje concreto, pero con la cantidad que tiene I Don’t Want This Kind of Hero, eso habría sido un error. Aun así, sabemos cosas de los personajes que se nos muestran por, por ejemplo, flashbacks cortos, y ayudan a comprenderlos.
No solo los personajes son complejos, sino que el que quien espere que Naga sea un protagonista típico de shônen se decepcionará. Su diseño es el más normal que vemos y, pese a sus poderes, sólo quiere vivir tranquilo y tener un futuro seguro (es más, por eso no pueden reclutarlo para SPOON hasta que Dana toma el asunto en sus manos). Y es muy… adolescente. Tiene creencias firmes, pero al pasar ciertas cosas se sacudirá su mundo, y con razón. Es un personaje muy bien hecho y con el que podemos empatizar, que veremos evolucionar y desarrollarse.
El resto de personajes no son buenos, por más que sean héroes. Son grises. Naga, por destacar lo obvio, no acepta trabajar en SPOON por los actos heroicos, sino por horas de voluntariado, ayuda para entrar a la universidad y, por supuesto, sueldo. Pero, a la vez, se nos dice que odia a los criminales y que si fuera suya la decisión de dejar vivir a uno o hacer que muera, elegiría la segunda opción.
Para mostrar un ejemplo opuesto, Youngjeong, de la primera generación de héroes y fundadora del SPOON como lo conocemos, es cruel y no duda en tomar decisiones que otras personas verían como malvadas, sobre todo si es en pos del «bien mayor». Entre otras cosas, prefiere que los villanos, KNIFE, no sean capturados, Asimismo, su relación con ciertas criaturas mágicas y Songha puede verse como especialmente desagradable.
Ella, junto con Morae Baek, líder de KNIFE, serán los principales culpables de hacer a Naga replantearse muchas cosas como héroe y como persona. También hay presencia femenina en los personajes y se rompen ciertos estereotipos dañinos.
Pero, sin lugar a duda, incluso aunque el apartado artístico y los personajes son muy buenos, lo que hace destacar a este webcómic es la manera que tiene de enfocar su temática.
En primera instancia, están las críticas. Se dan en contexto cómico, de forma breve, pero pretenden dejar un impacto en el lector, a menudo por boca de Naga, bendito sea. Ejemplos son los comentarios sobre sexismo, relaciones entre personas con diferencia de edad (sobre todo cuando la misma involucra menores), acoso o trabajo infantil. Otras cosas que se tratan muy bien son la moralidad, el heroísmo y el amor.
El amor es uno de los temas más tratados a lo largo del webtoon. No podría ser de otra forma, ya que el principal objetivo de Morae Baek es que Raptor, miembro de SPOON, le ame como él a ella. Sin embargo, I Don’t Want This Kind of Hero no orbita alrededor del romance. Se nos muestra al amor en sus peores y mejores caras, rompiendo las idealizaciones y tratando las consecuencias de nuestros actos. Influye a gran parte de los personajes en sus acciones porque es algo que sienten de manera intensa. No sólo encontramos amor romántico, si bien es en el que más se enfoca (no por nada tenemos personajes como Morae Back, Lady, Songha o la misma Dana), sino también el familiar, tanto entre padres e hijos o entre hermanos.
Por desgracia, la obra no sale de la heteronormatividad (aunque Naga creía que Dana era chico y estaba enamorado de Osu, y Medusa tiene una cierta fijación con Dana). Una lástima, porque en materia de género sí se sale un poco de lo habitual: Amore aparece como mujer u hombre dependiendo de las preferencias personales de la persona con quien se esté relacionando.
En resumen, I Don’t Want This Kind of Hero es un muy buen webtoon para aquellos que disfrutan comedia y aspectos más oscuros y complejos, así como personajes grises. El estilo artístico puede echar para atrás en la primera impresión, pero es algo a lo que se acostumbra enseguida, y a medida que se complejiza la trama va mejorando también.
Lo que no está tan bien es la traducción. La oficial es en inglés, pero sobre todo al principio hay errores, principalmente de pronombres (de ahí que muchos lectores se hayan confundido con el género de Dana y la confundieran con un hombre). Por eso y por otras cosas, como samchon haciendo referencia a lo que dicen sus lectores, siempre es bueno ver los comentarios, al menos los más populares.
La historia se cerró en septiembre del 2017, si bien falta para que se termine de traducir al inglés por completo, así que tendremos que estar al pendiente de con qué nos sorprende samchon en su próximo trabajo. Con I Don’t Want This Kind of Hero como primera obra, el listón queda alto.