El tercer capítulo nos dejó bien claro que Yuuri es el Yuri prota de Yuri!!! on Ice. Era evidente desde el inicio, pero el equipo de animación siempre disfruta haciendo sufrir innecesariamente a los espectadores de las formas más crueles. Y sigo hablando del tema de Yuuri vs Yuri, no de la animación en sí, que también tiene su cosilla en cuanto a sufrimiento.
Empezamos el cuarto episodio viendo cómo Yuuri (o ser deforme #1) llega tarde a su entrenamiento con Viktor (o ser deforme #2) y, bueno, entrenan muy deformemente. Es que no tiene más la escena. Sí, a veces Yuuri se sonroja… Pero para mí que es por la carrera que se ha dado desde su cama hasta la pista de hielo. Eso y que está pensando en que Viktor —su ídolo— va a estar con él día a día como entrenador y posiblemente tenga que prostituirse para pagar sus honorarios.
Es broma, no existe la prostitución en Yuri!!! on Ice!
Así como tampoco existe la animación de calidad más allá de las escenas de fanservice y un mediocre porcentaje de primeros planos que ni siquiera llega al 80%.